Si uno se pone enfermo durante el viaje a Dublín conviene saber una serie de aspectos antes de emprender el desplazamiento a la capital de Irlanda. Así se podrá salvara esta situación de forma segura, rápida y tranquila.
1º. Urgencias:
En caso de emergencia se debe llamar a una ambulancia (999 o 112) o acudir a las urgencias de los hospitales Beaumont, St James o St Vincent’s. Dublin Dental Hospital atiende las urgencias dentales. Cierran los fines de semana, pero proporcionan números de guardia.
En las urgencias que no requieren ambulancia, se debe acudir a médicos generales o acudir a ambulatorios o al hospital público más cercano. En los hospitales públicos hay un servicio de traducción para los pacientes que no hablen inglés.
2º. Tratamiento médico:
Quienes residan en países de la Unión Europea tienen derecho a recibir atención médica gratuita en la República de Irlanda, solicitando la Tarjeta Sanitaria Europea en su centro de la Seguridad Social. En caso de enfermedad hay que presentarla junto a algún tipo de identificación, como el carné de identidad o el pasaporte.
Los ciudadanos de otros países tienen que llevar su propio seguro de enfermedad o accidentes, o pagar el tratamiento que reciban.
3º. Farmacias:
En las farmacias de Dublín se puede encontrar una amplia gama de medicamentos sin receta. No obstante, muchos fármcaos sí la necesitan, y solo pueden conseguirse bajo prescripción facultativa de un colegiado de la ciudad.
Si necesita tomar medicinas durante su estancia, lo mejor es traerlas o al menos llevar una receta del médico persona con el nombre genérico del producto. Además, siempre hay que pedir un rebido para poder presentarlo al seguro.
Si necesita una farmacia de guardia vaya a Hickey’s, una cadena de farmacias que cierra tarde. Hasta 1993 no fue fácil encontrar preservativos, pero ahora se pueden comprar en las farmacias, en las máquinas expendedoras de los baños o en los Spar.
Foto vía Red Farmaceútica