«Dubliners» («Dublineses»), la soberbia colección de cuentos publicada por el famoso escritor irlandés James Joyce en 1914, celebra su centenario por todo lo alto. Este compendio de quince relatos fue la segunda obra del autor de «Ulises» y se ambienta en Dublín, su ciudad natal. Por ello, es un gran libro para conocer la capital irlandesa.
James Joyce está considerado como uno de los representantes más sobresalientes del modernismo anglosajón. En «Dublineses», Joyce lleva a cabo un gran ejercicio de observación de la gente de su ciudad. Él, que pasó la mayor parte de su vida fuera de Irlanda, se toma muy en serio su deseo de recrear la vida y costumbres de la capital de su país. Y lo consigue.
Las historias se escribieron justo cuando el nacionalismo irlandés estaba en su cénit y en Irlanda crecía la idea de unidad nacional, que se materializaría en la declaración de independencia de julio de 1921. Atrapado en una encrucijada de la historia y de la cultura, Irlanda estaba sacudida por varias ideologías e influencias convergentes, y estos relatos dan una visión de los conflictos que estas tensiones generaron en el día a día en Dublín.
James Joyce ambienta sus relatos en los meses anterioers a la independencia de la católica Irlanda respecto al protestante Reino Unido. El literato irlandés quería escribir un capítulo de la historia moral de su país, y eligió Dublín para escenificarla pues esa ciudad le parecía el paradigma de la parálisis. Al hablar de parálisis, Joyce se refería a una especie de bloqueo cultural, mental y social que, según su opinion, aquejaba a su ciudad debido al sometiemiento por partida doble al Imperio Británico y a la Iglesia Católica.
Por último, esta magna obra, en la que muchos expertos encuentran claros componentes autobiográficos del autor, ha inspirado a infinidad de escritores y no escritores. Y es un hito para todo aquel que desea hablar y conocer Dublín.
Foto vía Oprah