Drury Street, el Dublín más bohemio y vintage

En el corazón de la capital de Irlanda,  a poca distancia de Grafton Street, Drury Street, presenta un encanto único. En vez de locales de cadenas internacional y muchos turistas, sólo se hallan transeúntes y una diversa convivencia de boutiques abiertas en edificios de ladrillos, que ofrecen todo tipo de cosas, desde objetos para  la casa  hasta el arte irlandés.

Drury Street, el Dublín más bohemio y vintage

Drury Street se sitúa al sur del Museo Nacional de Cera y al oeste del Castillo Dublin, en la zona de moda  en los últimos años de los dublineses.  Para comenzar las compras,  en “Industry”,  lo nuevo y lo vintage son el hito más característico este negocio con estilo propio. Los artículos se renuevan cada semana y se puede encontrar desde las típicas mantas Donegal, de lana azul a rayas, hasta una gran  lámpara de techo de cobre.

Por otro lado, “Jenny Vander” destaca como un local de ropa y accesorios ideal para mujeres que pasan los 40 años. Vender artículos tan singulares como  un espejo de mano estilo art déco, trajes de baño floreados de los años 50 y una capa victoriana de seda negra.

Asimismo, si se buscan impresiones y litografías de más de noventa artistas irlandeses hay que acudir a  The Printmakers Gallery.  Todas son modernas, como por ejemplo “Contemporary Ruin”, de Brian Maguire conocido por haber pintado algunas de las 1.400 mujeres asesinadas en Juárez (México).

Por otra parte,   “Stockes Books” funciona en un local del primer cuarto del siglo XX. Se venden sobre todo tomos de historia y textos literarios. Si bien hay ediciones baratas de Oscar Wilde y Samuel Beckett, la mayoría de los que aparecen por aquí buscan lo que encontrarán, como rarezas como la primera edición de “Ulysses”, de James Joyce.

Por último, si se desea acudir a un joyero de verdad, sólo habrá que  entrar a Barry Doyle Design Jewellers, en donde se verá al mismo señor Doyle trabajando en alguna de de sus piezas, detrás de las vitrinas de exposición.