Datos útiles para salir por Dublín

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Si queréis vivir los dublineses, optad sin dudarlo por veladas en el pub. Es toda una institución social, el lugar donde la getne se encuentra y donde se invitan unos a otros. Aquí se viene a beber y a hablar, pero, también a escuchar música.

La mayoría de los programas musicales suelen anunciarse para las 21.00 21.30 horas. Pero, dado que la puntualidad no es una virtud irlandesa, preparaos para esperar a menudo hasta las 22.00 horas.

Por la noche hay que pagar, a veces, una pequeña entrada (entre 5 y 10 euros). Podéis evitarlo llegando antes de las 21.00 horas. El servicio se detiene a las 23.00 horas en invierno (23.30 horas en verano), pero el local alarga todavía un poco hasta más o menos medianoche.

Por otro lado, el ambiente en los locales nocturnos es totalmente diferente: se viene a ver y ser visto, para tener la sensación de ser parte del Dublín que se mueve. Su auge es relativamente reciente y procede del éxito planetario del rock irlandés.

Si hay un foco ineludible que debemos aconsejar ése es Temple Bar, el barrio más animado de la noche dublinesa, con un inmensa cantidad de restaurantes, pubs y locales nocturnos.

Respecto al teatro, Dublín está ampliament provistas de adecuadas salas. Las obras se distinguen por una creatividad remarcable. No en vano, los irlandeses están orgullosos de pertenecer a una nación literaria.

Los conciertos clásicos, ballets y óperas son muchos menos apreciados y no tienen lugar más que durante cortas temporadas y en las mismas salas que el teatro.

Además, el pub es un lugar informal y no existe, pues, un modo de vestir particular. Como están abiertos todo el día, uno viene tal como es. No hace falta llevara una vestimenta o traje demasiado elegante.

En cambio, la noche tiene sus propios códigos. Los locales nocturnos y bares de noche suelen estar frecuentados por una clientela muy moderna de fashion’s victims. Es fundamental saber que lo mejor es, más bien, pasar inadvertido.

Foto vía Viaje Jet