En los últimos años, Irlanda se ha ganado un sitio en la cultura gastronómica al plantear a sus visitantes numerosas rutas para saborear los manjares típicos de la isla.
Excelentes pescados, mariscos de alto nivel (especialmente ostras y bogavantes), carnes de fama mundial, sabrosos quesos y una gran huerta explican que la comida irlandesa haya ganado adeptos. Sin duda, mucho más patatas cocidas. Por ello, muchos críticas ya colocan a la gastronomía irlandesa en una buena posición a nivel europeo.
Ademamás, en Irlanda han aparecido varios notables cocineros dispuestos a usar todos estos ingredientes y debido a su trabajo se han reconocimientos, premios y estrellas Michelín para la comida irlandesa Ecima, estos cocineros quieren desligarse completamente de lo peor de la cocina británica.
Por ejemplo, en Dublín, el famoso restauranet The Greenhouse (ubicado en Dawson Street) continúa acaparando premios en los Irish Restaurant Awards. También sobresale el resturante Chapter One (situado en 18-19 Parnell Square) que cuenta con una estrella Michelin y varias nominaciones a mejor local de todo el país. Dos citas ineludibles si uno quiere conocer la moderna cocina irlandesa con toques clásicos en Dublín.
Por otro lado, merece la pena conocer los mercados al aire libre. Los mejores productos frescos, así como quesos o panes artesanos, se pueden comprar en los numerosos mercados al aire libre que existen en la mayora parte de las ciudades irlandesas . El más famoso es el de frutas y verduras ecológicas que se ubica en el distrito 1 de Dublín.
Y, lógicamente, una buena comida debe ser complementada con algo tan típico en Irlanda como es una cerveza. La negra Guiness es la más conocida de las cervezas irlandesas, pero no la única ni mucho menos. La variedad es tan amplia como ciudades y pueblos hay, pues cada lugar tiene su propia marca. Por ejemplo, la villa de Kilkenny, da nombre otra de las cervezas más conocidas del tipo red ale.
Foto vía Viaje Jet
